El Kaiser Carabela fue el primer auto de producción nacional fabricado en serie. Su diseño se baso en el norteamericano Kaiser Manhattan, fue un auto poco aceptado por el público argentino ya que tenía un alto costo de mantenimiento, debe ser ese el motivo y porque el público buscaba autos mas compactos y de menor consumo; que solo se fabricó durante 4 años, desde 1958 a 1962. En el año de su lanzamiento se produjeron 2500 unidades. Para el fin de su producción habían salido de la línea de montaje 8126 vehículos.
Allá por 1962 una nota en la revista Parabrisas lo titula «Un bote en tierra firme» y dicho apodo todavía es válido hoy en Argentina, ya que aún es el vehículo de pasajeros más pesado, largo, ancho, y con mayor distancia entre ejes producido en el país.
El Test Drive de parabrisas destacaba: «Aunque el Carabela es largo, su dirección tiene mucho ángulo y el círculo de viraje no es, por cierto exagerado»; » El frenaje del Carabela nos sorprendió; no es fácil parar esa verdadera mole…»
Virtudes | Defectos |
Gran comodidad interior Excelentes prestaciones del motor Muy buena accesibilidad a las plazas delantera y trasera Cerradura en ambas puertas delanteras Excelente visibilidad hacia los cuatro costados Encendedor y cenicero adelante y atrás Gran ventilación por ventiletes en las cuatro ventanas Potentísimas luces altas | Dirección sumamente pesada a baja velocidad Incomodo sistema de traba de puertas mediante perillas Mejorable freno de mano Deficiente área de barrido de los limpiaparabrisas Guantera de reducidas dimensiones Reloj interior (opcional) de mala calidad y diseño Consumo elevado a altas velocidades Capot sumamente pesado para levantar Ausencia de cerradura en la tapa de combustible Incomodo reemplazo de las ruedas traseras |
Luego de la fabricación del Jeep, la Estanciera y Baqueano Industrias Kaiser Argentina comienza a importar repuestos y equipamiento para la fabricación del Carabela, junto con este embarque vienen unas 1000 unidades del Kaiser Manhattan terminado, listo para la venta. Su fabricación nacional demandó un 80% de piezas de industria local.
Fue equipado con el ya conocido motor Continental 6L-226 de 3700cm3 y un carburador Cárter WCD. Su consumo promedio en ciudad era de 6.3 km por litro de combustible y aceleraba de 0 a 100 km/h en 31s. Desarrolaba una velocidad máxima de 138 km/h.
Nota: Autonostalgía
Fuentes:
Argentina, Archivo General de la Nación, Departamento Documentos Fotográficos
Revista Parabrisas Nro 14, Año 1962